■ Comienza la producción en serie del sensor de radar trasero MRR

Evitará los peligros de los ángulos muertos al cambiar de carril.



Un fabricante de automóviles líder en Europa ha iniciado la producción en serie del sistema de sensor de radar MMR de medio alcance para aplicaciones traseras, basado en los radares de Bosch de cuarta generación, para equiparlo en uno de sus modelos de tamaño medio de mayor aceptación. Este asistente de cambio de carril desarrollado por Bosch recibe la información necesaria del nuevo sensor de radar que controla todo el tráfico detrás del vehículo.
Para hacer más seguro el cambio de carril, este productor europeo ha montado dos sensores traseros MRR (acrónimo de Mid-Range Radar, o Radar de Medio Alcance) en el parachoques trasero: uno a la izquierda y otro a la derecha, que vigilan la zona lateral y trasera. Un potente software de control compara la información transmitida por el sensor para generar una imagen completa del tráfico existente detrás del vehículo. En el momento en que otro vehículo se aproxime a mayor velocidad por detrás o que ya se haya situado en el ángulo muerto, una señal luminosa en el retrovisor del lado correspondiente avisa al conductor del peligro. Si el conductor activase el intermitente, el asistente de cambio de carril emite un aviso acústico y/o vibratorio.
Además, el sistema trasero MRR tiene más funcionalidades. Estos sensores también forman parte del sistema de alerta de tráfico transversal de Bosch, que ayuda a los conductores en las maniobras de marcha atrás al aparcar en batería cuando la visión trasera es difícil. Es capaz de reconocer vehículos, ciclistas y peatones que, durante este tipo de maniobra, crucen por detrás de ambos lados del vehículo hasta una distancia de 50 metros, alertando al conductor a tiempo, mediante una señal audible y/o visible, sobre el peligro inminente de colisión.

FOTO: Bosch.