La Unión Europea aprueba que los fabricantes de automóviles estén obligados a introducir el sistema de llamada automática de emergencia (eCall) en todos los coches nuevos como muy tarde el 31 de marzo de 2018. Retrasan, de este modo, la fecha inicial propuesta dos años y medio por la Comisión para introducir obligatoriamente el e-Call (octubre de 2015).
El acuerdo incluye cláusulas sobre protección de datos que evitan el seguimiento de los vehículos equipados con este sistema antes de un accidente. Además, en caso de accidente la llamada automática dará a los servicios de emergencia únicamente datos básicos mínimos como el tipo de vehículo, el tipo de carburante utilizado, el momento del accidente y la localización exacta. Asimismo, esos datos no se podrán transferir a terceros sin el consentimiento expreso de la persona afectada.
Los fabricantes garantizarán que el diseño de la tecnología eCall permitirá el borrado de los datos reunidos. El acuerdo debe incorporarse a las legislaciones nacionales antes del próximo mes de mayo, salvo en Reino Unido, Dinamarca e Irlanda, que tienen dos años más de plazo.