■ Ford cede las patentes de su tecnología eléctrica a la competencia a través de una ONG



La finalidad es promoverlos y permitir la reducción de su precio.

La compañía automovilística estadounidense Ford ofrece las patentes que protegen su tecnología sobre coches eléctricos o electrificados a sus competidores con la finalidad de promoverla y conseguir, por medio de su aparición en más modelos que la adopten, de economías de escala que permitan la reducción del precio de los mismos, una de las razones de la poca aceptación que está teniendo la tecnología pese a que las encuestas y las prospecciones de mercado indiquen que todo el mundo desea tener uno.
No son los primeros en ceder sus patentes. Toyota hizo lo mismo con su tecnología híbrida aunque no con buenos resultados por las dudas legales que se generaron en su momento. Por este motivo, Ford ha decidido que la cesión de patentes no sea completamente gratuita sino que conlleve el pago de una cierta cantidad que, en el peor de los casos, puede elevarse a unos pocos miles de dólares.
El pago por las tasas se llevará a cabo a favor de AutoHarvest Foundation, una ONG a la que Ford ya había donado anteriormente los derechos de algunas patentes, como los cinturones de seguridad inflables. Esta organización certificará las patentes realmente adquiridas para que no vuelva a haber más dudas. En este sentido, Ford se ha mostrado más prudente que Tesla al ofrecer libremente sus avances para coches eléctricos.
Mientras Ford ofrece su tecnología sobre el vehículo eléctrico, Toyota comparte sus conocimientos de la pila de hidrógeno con la que ya ha comercializado su primer modelo, el Mirai, una berlina de cuatro puertas con maletero.
La alianza Renault-Nissan que, como Ford y por medio de Nissan, asumió la tecnología híbrida de Toyota, ha anunciado que por el momento no tiene intención de producir ningún coche con ella o con su variante para poder recargar las baterías de los coches por enchufe. Consideran que tendrán que pasar varios años antes de que los precios de los componentes mecánicos de estos coches reduzcan sus precios y puedan ser asequibles para el gran público.

Foto: Ford.