■ Harley-Davidson: 112 años en las carreteras.


La Harley-Davidson Motor Company fue fundada en Milwaukee (Wisconsin, Estados Unidos) en 1903 por William Harley y los hermanos Arthur, Walter y William Davidson en un pequeño garaje usado como taller, situado en el patio trasero de la casa de la familia Davidson. Allí, en su primer año construyeron tres motocicletas con motores de 163,9 centímetros cúbicos, monocilíndricas y de tres caballos de potencia. Al año siguiente crearon con sus propios diseños su primer modelo de competición y, con su creciente producción, en 1907 la cifra de motos fabricadas ascendió a 150 unidades, ya en su propia factoría.
En 1909 introdujeron el motor de dos cilindros en V con ángulo de inclinación de 45 grados, de 811 centímetros cúbicos que producía siete caballos de potencia y lograba alcanzar una velocidad tope de 96,6 kilómetros por hora. Éste caracterizó, desde entonces, el famoso motor V-Twin.
Su dinámica de crecimiento continuó de forma imparable, hasta el punto de que en 1914 su producción alcanzó las 16.284 motocicletas. Con la entrada de los Estados Unidos en la Primera Guerra Mundial, en 1917, Harley-Davidson se convirtió en el proveedor oficial de su ejército, al que suministró decenas de miles de vehículos. Las dos guerras mundiales ayudaron a la compañía a difundir su producto a través del mundo y así hacer crecer la fábrica a unos niveles de producción de 90.000 unidades por año.
Tres años después, en 1920, Harley-Davidson se consolidó como el fabricante de motocicletas más grande del mundo estando presente en 67 países. Pero con la llegada de la Gran Depresión del 29, la producción cayó en picado hasta el punto de tener que adaptar los modelos y métodos de fabricación a los nuevos tiempos.

Posteriormente, ya en las décadas de los 50 y 60, vivió una época de gran esplendor debido, entre otras razones, a que artistas de la talla de James Dean o Elvis Presley convirtieron esta máquina en el símbolo de su generación. Además, Hollywood hizo que el público identificara estas motocicletas con la imagen de individuos pandilleros y rebeldes al influir en él con la inclusión de una indumentaria integrada por chaquetas de cuero con tachas, camisetas y los famosos pantalones vaqueros Levis. No obstante, también las asoció con un estereotipo negativo de conductor, debido a que en sus películas se los presentaba como maleantes y violentos. Esto hizo que el éxito y reputación de la marca cayese en picado.
Mientras, por un lado la aplicación de nuevas tasas e impuestos encarecía enormemente la exportación y venta de motocicletas, en 1969 la fabrica fue adquirida por la American Machine and Foundry (AMF), que incrementó la capacidad de producción, abrió nuevas plantas y diversificó los productos. Sin embargo, la calidad bajó debido al alto número de unidades que se producían y la competencia de las motocicletas japonesas que se podían adquirir por un tercio del precio de una Harley.
En 1.980 estuvo a punto de cerrar sus puertas, pero gracias al esfuerzo de trece ejecutivos de la fábrica que la adquirieron, entre los que se encontraban Willie G. Davidson y Vaughn Beals, fue salvada de su liquidación. Se cerraron varias plantas y se decidió volver a lo que se sabía hacer mejor, fabricar motos explotando su propia personalidad. Con el lanzamiento del motor Evolution de 1340 c.c. en 1984, más potente, liviano y de menor mantenimiento, Harley recaptura a sus clientes.
Para consolidar su posición en el mercado actual, Harley ha incrementado su participación en las competencias de velocidad y ha desarrollado la nueva marca “Buell”, para llegar a este segmento de alto rendimiento, conocido como el mercado de las “Superbike”.
En 2.013 celebró su 110 aniversario, presumiendo oficialmente de construir su moto número cuatro millones en la fábrica de York, Pensilvania.

Foto: Motos Harley-Davidson.