■ Un dispositivo de 20 euros permite piratear coches



Está programado sobre el Protocolo K-Line y necesita que la placa esté conectada al puerto CAN del vehículo.

Los desarrolladores españoles Alberto García Illera y Javier Vázquez Vidal han creado un dispositivo capaz de configurar y modificar numerosos parámetros del coche a través de la ECU con la intención de convertirlo en un posible sistema de diagnóstico a vender a Tráfico o a las aseguradoras. No obstante, no es su única utilidad pues, al tiempo que cumple estas funciones, puede facilitar a manos malintencionadas el pirateo y control del vehículo.
El entorno de desarrollo del equipo está basado en la plataforma Arduino, un hardware libre elaborado a partir de una placa con un microcontrolador al que se conectan puertos de entrada y salida, y su precio de conjunto (inicialmente formado por once componentes) es de 19,21 euros.
El aparato fue presentado en la última edición de la convención de hackers Def Con 21 celebrada en Las Vegas, y permite su manejo por Bluetooth desde otro dispositivo, aunque no hay peligro de mal uso a distancia. Sólo se necesita tener la placa conectada físicamente al puerto CAN del coche, el más utilizado por los fabricantes automovilísticos en sus modelos. Además, el dispositivo está programado sobre el Protocolo K-Line (muy habitual en vehículos de 2010 y anteriores), aunque los desarrolladores comentan que puede ser adaptado con facilidad, ya que ninguno de los protocolos utilizados por las marcas destaca especialmente por su seguridad.
Conectado al OBD del auto (sistema general del diagnósticos a bordo), monitorea y controla los parámetros y otros dispositivos, y opera como “caja negra” en caso de accidente. Entre sus posibles aplicaciones, que demuestran la vulnerabilidad de los automóviles actuales y pone en entredicho las inversiones de millones de euros en tecnología y desarrollo de los fabricantes, figura la inmovilización completa del auto, la activación y desactivación de funciones diversas como los frenos de emergencia, las luces y la alarma, e incluso la dirección asistida.

Fotos: Illera y Vidal.