■ Más de dos décadas de la tecnología de construcción ligera Audi Space Frame


Este concepto de carrocería revolucionó la fabricación de automóviles.

Hace 22 años Audi presentó en el Salón Internacional del Automóvil de Frankfurt (IAA) un innovador concepto de carrocería de aluminio que revolucionó la construcción ligera en el mundo de la automoción. El “ASF” (Audi Space Frame), se mostró sobre un vehículo de exposición de color plata brillante.
En aquellos años, los ingenieros automovilísticos se sirvieron de la sabiduría de la naturaleza como fuente de inspiración en sus proyectos. Así, por ejemplo, los expertos en construcción ligera de la firma de los cuatro aros se basaron en el principio de que una colmena sólo usa el material necesario para hacer un nido de abeja que proporcione resultados óptimos. Con esta idea elaboraron el denominado ASF, un bastidor que se compone de perfiles de aluminio extruidos y de troqueles de piezas de fundición a presión. Los paneles (techo, suelo y laterales) están integrados en este bastidor por distintos tipos de uniones, lo que hace que sea semiautoportante. Los componentes individuales tienen varias formas y secciones transversales, dependiendo de su cometido.
Apenas un año después del Salón del Automóvil de Fráncfort 1993, la compañía lanzó al mercado el primer coche del mundo con un volumen de producción elevado y carrocería de aluminio, el Audi A8. Los paneles de este modelo estaban compuestos por más de 336 componentes individuales, unidos por secciones y puntos de fundición. El 75 por ciento, aproximadamente, del ensamblaje se realizaba a mano.
El principio ASF se ha ido extendiendo a otros modelos lo largo de las dos últimas décadas: Audi A2 (2000), Audi TT (2006), Audi R8 (2008), así como a las dos generaciones siguientes del Audi A8 (2002 y 2010). En total, desde 1994 la compañía ha fabricado más de 750.000 vehículos utilizando los principios de construcción ASF, tanto en automóviles elaborados completamente en aluminio, como en diseños híbridos de aluminio.
Este año, coincidiendo con la celebración de las dos décadas del éxito de este tipo de carrocería, la compañía ha expuesto el nuevo Audi A8 en Fráncfort. El modelo, gracias a su arquitectura ASF y a una mezcla inteligente de aluminio y acero de alta resistencia, sólo pesa 231 kilos. Si la misma carrocería hubiese sido fabricada de acero, sería un 40 por ciento más pesada.

Foto: Audi