Volkswagen ha llamado a revisión a lo largo de este año a varios modelos, entre ellos, la 'pick-up' Amarok. Esta petición se
ha extendido a 2,4 millones de vehículos sólo en territorio germano. La reparación
de este vehículo cuessta al grupo alemán medio millón de euros. Los motores
diésel de 2 litros sólo necesitan una actualización del software para que
cumplan la normativa de emisiones de gases, según informó la agencia alemana
DPA, por lo que en media hora el problema puede estar resuelto.
Los de 1,6 necesitan, además de la citada actualización, instalar
en el sensor de la masa de aire un transformador de fluidos que permita que
el aire sea aspirado mejor y que el consumo de combustible sea más eficiente.
Foto: Volkswagen.