■ Diésel menos contaminante a partir de neumáticos usados



El proceso está libre de emisiones y residuos. 


La empresa australiana Green Distillation Technologies (GDT) quiere revolucionar la forma de reciclar los neumáticos. Para ello lleva trabajando varios años en un tecnología que le permite transformarlos en productos valiosos y vendibles como acero, petróleo y carbono. Asimismo, también ha creado una aplicación que permite extraer un aceite de las ruedas de caucho natural y sintético viejas, que se podría utilizar para fabricar un diésel menos contaminante. 

Tecnología de destilación destructiva
GDT utiliza una tecnología conocida como destilación destructiva para controlar el calentamiento de dos sustancias orgánicas complejas en ausencia de aire para romperlas, originando una serie de productos volátiles que se condensan y se recogen. Éstas reducen los neumáticos a sus elementos crudos. A continuación, los elementos de neumático se transforman en aceites que luego se destilan y se recogen. Debido a que el carbono es el elemento más abundante en el caucho del neumático, se entrega en forma de polvo de la más alta pureza. GDT elimina el acero, lo limpia meticulosamente y lo recoge antes de pasar a la siguiente fase del proceso. La principal ventaja es que implica únicamente la aplicación de calor, en un proceso libre de emisiones y residuos.
El aceite obtenido por este procedimiento permite, al ser mezclado con diésel, limpiar el combustible para hacerlo menos contaminante. Los científicos de la Universidad de Tecnología de Queensland en Australia han podido comprobar la eficacia de este compuesto, y sus resultados demuestran que el aceite tiene la capacidad de reducir las emisiones sin que el motor acuse ninguna pérdida de rendimiento.

Datos comprobados
Los investigadores han llevado a cabo diversas pruebas con mezclas de combustible y aceite al 10% y al 20% en motores diésel de seis cilindros con inyección directa, turbocompresor y common rail. Estos exámenes han demostrado que, con esta técnica, existe una reducción del 30% de óxido de nitrógeno, un gas de efecto invernadero muy contaminante, de manera que el combustible resultante tiene menos emisiones contaminantes.
Además, el aceite obtenido mediante el reciclaje de neumáticos usados también puede ser utilizado como combustible para calefacción, y si se lleva a cabo otro proceso de refinado, se podría incluso utilizar como combustible para aviones. Esta tecnología podría revolucionar la gestión de los vertederos de neumáticos, además de reducir considerablemente las emisiones de combustible diésel. 

Foto: Motormática.