■ Se investiga un posible cártel de fabricantes de coches alemanes

La Comisión Europea sospecha que Volkswagen, BMW, Audi y Porsche podrían haber acordado los precios de los sistemas de tratamiento de las emisiones de sus vehículos diesel.


Dos años después del escándalo del trucaje de los motores diesel de Volkswagen para falsear las emisiones, Bruselas abre una nueva investigación a los principales fabricantes automovilísticos de Alemania por posibles acuerdos ilegales en materia de tecnología, costes y proveedores. La Comisión Europea está investigando la presunta existencia de un cártel en colaboración con la autoridad alemana competente. "La Comisión Europea y la Bundeskartellamt han recibido información sobre esta materia que está ya siendo evaluada por la Comisión. Es prematuro aún especular más allá", ha informado el ejecutivo comunitario.
De demostrarse, las multas que fija la UE por este tipo de prácticas podrían alcanzar hasta el 10 por ciento del volumen total de negocio, considerado a nivel global.
El semanario Der Spiegel fue el primero en informar sobre el posible acuerdo que Volkswagen, Audi, Porsche, BMW y Daimler podrían haber establecido para fijar los precios de los sistemas de tratamiento de las emisiones de sus vehículos diesel, mediante la creación de comités industriales secretos. Además, Der Spiegel indicó que Volkswagen reconoció haber realizado estas posibles prácticas en contra de la ley de competencia del país en una carta enviada a las autoridades de competencia del estado el pasado 4 de julio.
En esta misiva se confirma que, alrededor de 200 empleados de dichas compañías se reunieron en unos 60 comités industriales con la intención de discutir sobre aspectos como el desarrollo del vehículo, frenos, motores de gasolina y diesel, cajas de cambio, la elección de los proveedores para la fabricación de sus vehículos, el precio de las piezas y hasta el tamaño de los depósitos del líquido destinado al tratamiento de los gases. A este respecto acordaron la utilización de uno de pequeño tamaño, en lugar de opciones de mayor volumen que también estaban barajando.
De confirmarse las sospechas, la Comisión podría imponer multas récord a los constructores implicados. No obstante, según fuentes comunitarias la investigación se encuentra todavía en una fase preliminar y queda mucha información por analizar.

Foto: Motormática.